Tu matrimonio roto: 10 poderosas maneras de arreglarlo
- dua.com Team ·
- 14.04.2023 ·
- Casamiento ·
- 13 min read
Pasar por un matrimonio roto es duro. Tanto tú como tu pareja podéis sentiros heridos e inseguros sobre el futuro.
Cuando el vínculo que una vez os unió a los dos empieza a fracturarse, puede ser difícil saber cómo repararlo.
El primer paso sería identificar las razones que os han llevado a ti y a tu pareja a esta situación. Dichas razones pueden ser diversas, desde rupturas de comunicación hasta diferentes puntos de vista sobre los objetivos vitales.
Independientemente de la causa, los efectos de un matrimonio roto pueden ser devastadores. Sin embargo, es importante recordar que es posible curar un matrimonio roto.
¿Lleva tiempo? Sí. Pero con el apoyo y el esfuerzo adecuados, es posible reconstruir una relación más fuerte y satisfactoria con su pareja.
En este artículo, vamos a mostrarle 10 poderosas formas de arreglar su matrimonio.
Siguiendo estos 10 pasos, podrá reconstruir una relación más fuerte y satisfactoria con su pareja. Veamos cada uno de los pasos a continuación.
Matrimonio roto: Arréglate tú primero
Empecemos centrándonos en ti por un momento.
¿Sabes que dicen que «hacen falta dos»? Pues lo mismo se aplica a arreglar un matrimonio roto.
En lugar de culpar a tu pareja de todo, es importante que reflexiones sobre tus propias acciones y veas cómo puedes mejorar como pareja.
Hazte preguntas como ¿Soy el mejor compañero que puedo ser? ¿Estoy haciendo todo lo que puedo para contribuir a un matrimonio feliz? ¿Hay aspectos en los que puedo mejorar?
Nadie es perfecto, pero si estás dispuesto a trabajar primero en ti mismo, puedes hacer que tu matrimonio sea más fuerte. Asegúrate de que estás completo y seguro de ti mismo, para que tu pareja no tenga que cargar con tu peso en la relación.
Además, cuando te conviertas en la mejor versión de ti mismo, aportarás mucho amor y positividad a tu matrimonio.
E incluso en el caso de que el matrimonio no funcione, al menos sabrás que has hecho todo lo posible por mejorar vuestra relación.
Recuerda POR QUÉ os enamorasteis
Cuando la relación que una vez fue amorosa empieza a fracasar, puede ser increíblemente doloroso reflexionar sobre el amor que una vez existió entre los dos.
Sin embargo, cuando se trata de reparar un matrimonio roto, es esencial volver a conectar con los aspectos fundamentales que inicialmente le atrajeron hacia su pareja.
Al revisar los aspectos básicos de su relación, puede obtener una nueva perspectiva de su situación actual y volver a encender la chispa que inicialmente los unió.
Tómese su tiempo para reflexionar sobre lo que le hizo enamorarse de su pareja y considere la posibilidad de escribirlo.
Concéntrese en las cualidades que admira de su pareja y en las características únicas que le atrajeron hacia ella.
Recordar los inicios de la relación puede ser un reto, pero también una herramienta poderosa para renovar el compromiso mutuo y encontrar el camino a seguir.
Reconectando con los cimientos de vuestro amor, podréis empezar a reconstruir y arreglar vuestro matrimonio roto.
Enumere los rasgos positivos de su pareja
Una forma de arreglar un matrimonio roto es centrarse en los rasgos positivos de su cónyuge.
Por supuesto, es importante reconocer que esta técnica no funcionará en todas las situaciones. En casos de abuso, por ejemplo, enumerar los rasgos positivos no es una solución.
En estos casos, los rasgos positivos nunca superarán a los negativos, por lo que no debes cargar con la responsabilidad de arreglar una relación así.
Sin embargo, si los problemas están más relacionados con diferencias de prioridades, falta de comunicación u otros problemas, puede ser útil enumerar los rasgos positivos de tu cónyuge.
Tome nota de todas las cosas que su cónyuge hace bien y aprécielas, como cocinar bien, trabajar duro o demostrar amor.
Al enumerar los rasgos positivos de su cónyuge, puede empezar a apreciarlo por lo que es y por lo que aporta a la relación.
Recuerde que un matrimonio roto no tiene por qué seguir roto. Enumerar los rasgos positivos de tu pareja puede ayudaros a cambiar la energía de vuestra relación y a trabajar juntos por un futuro mejor.
Escuchar para comprender
La mayoría de nosotros nos comunicamos escuchando sólo para responder. Por eso, a veces ésta puede ser una de las razones por las que se rompa tu matrimonio.
Por supuesto, tener una respuesta meditada es valioso, pero si te centras en tu propia respuesta en lugar de escuchar activamente lo que dice la otra persona, no estás escuchando de verdad ni comunicándote con eficacia.
Por eso, es muy importante escuchar de verdad lo que tu pareja tiene que decir, y pedirle que haga lo mismo.
Haciendo un esfuerzo consciente por escuchar y comunicarse eficazmente, puede empezar a descubrir los problemas subyacentes que pueden haber contribuido a la ruptura de su matrimonio.
Además, escuchar el punto de vista de tu pareja puede ayudarte a comprender mejor sus sentimientos y experiencias, y viceversa. También puede ayudar a que ambos se sientan escuchados, comprendidos y valorados en la relación.
Así que tómese su tiempo para escuchar de verdad a su pareja. Puede que sea la clave para abrir una relación más fuerte, sana y feliz.
Expresa lo que quieres
Matrimonio roto: Cuando te cuesta expresar tus necesidades, se genera frustración y resentimiento, que más tarde desembocan en la ruptura del matrimonio.
Es importante recordar que su pareja no lee la mente y puede que no sepa lo que usted quiere a menos que se lo diga.
Empiece por identificar lo que quiere de su pareja.
¿Más tiempo de calidad juntos? ¿Más afecto? ¿Más apoyo en algún aspecto de su vida?
Una vez que sepa lo que quiere, expréseselo a su pareja de forma clara y concisa. Evita acusar o culpar y céntrate en cómo te sientes y qué necesitas.
También es importante escuchar la respuesta de tu pareja y llegar a un compromiso que satisfaga a ambos.
Expresar lo que quieres puede ser difícil, sobre todo si no estás acostumbrado a ser una persona abierta y vulnerable. Sin embargo, es necesario cambiar esto en el matrimonio si quieres arreglar un matrimonio roto.
Establezca normas
Cuando decida trabajar para salvar su matrimonio roto, establecer algunas reglas básicas puede ayudar a crear un entorno positivo para el cambio.
Crear y seguir reglas puede ayudar a establecer confianza, comunicación y respeto mutuo entre usted y su pareja.
Las normas que establezca dependerán de su situación específica y de los problemas que hayan causado la ruptura de su matrimonio.
Por ejemplo, puedes crear una norma para no sacar a relucir errores del pasado o no utilizar un lenguaje hiriente durante los desacuerdos.
Otra norma podría ser reservar un tiempo a la semana para pasar tiempo de calidad juntos, como salir por la noche o compartir actividades.
Estas normas pueden ayudar a construir una base más sólida para la relación y evitar futuros conflictos.
Es importante que las establezcáis juntos y que os comprometáis a cumplirlas en la medida de vuestras posibilidades.
Recuerda que establecer normas no significa que estés controlando o limitando el comportamiento de tu pareja. Es más bien una forma de mostrar respeto y compromiso con la relación.
Creando y siguiendo estas normas, podréis dar pasos positivos hacia la reparación de vuestro matrimonio y la construcción de un futuro mejor juntos.
Comprométase a cambiar
Cuando un matrimonio fracasa, uno de los pasos más importantes es comprometerse a cambiar.
Una vez establecidas las normas, podrá trabajar con su cónyuge para encontrar soluciones a esos problemas.
Comprometerse a cambiar requiere honestidad, comunicación abierta y voluntad de hacer sacrificios por el bien del matrimonio.
Esto puede significar hacer cambios en su propio comportamiento o actitud, como ser más paciente, comprensivo o empático.
También puede significar trabajar con su cónyuge para introducir cambios en la forma de comunicarse, de afrontar los conflictos o de pasar el tiempo juntos.
Es importante tener en cuenta que el cambio no se produce de la noche a la mañana y que reconstruir el matrimonio llevará tiempo y esfuerzo.
Pero al comprometerse a cambiar, le está demostrando a su cónyuge que se toma en serio arreglar lo que está roto y crear una relación más fuerte y sana.
Recuerde que para que un matrimonio funcione hacen falta dos personas, por lo que es esencial que ambos estén comprometidos con el proceso de cambio.
Deje espacio a su pareja
Cuando un matrimonio atraviesa una mala racha, es natural querer pasar más tiempo con la pareja para solucionar las cosas.
Sin embargo, a veces lo mejor que puede hacer es dar espacio a su pareja. Esto significa respetar su necesidad de tiempo a solas y no presionarle para que hable o pase tiempo contigo cuando no está preparado.
Es importante recordar que todo el mundo necesita un poco de espacio para reflexionar y procesar sus pensamientos y emociones.
Al dar a tu pareja el espacio que necesita, demuestras que respetas sus sentimientos y que estás dispuesto a darle el tiempo y el espacio que necesita para resolver sus problemas.
También es importante que aproveches este tiempo para reflexionar sobre tu comportamiento y tus acciones en la relación.
¿Hay algún patrón que haya contribuido al estado actual del matrimonio? ¿Hay cambios que puedas hacer para mejorar la relación? Utiliza este tiempo para trabajar en ti mismo y centrarte en lo que puedes hacer para mejorar las cosas.
Valida sus sentimientos y comunica tu voluntad de trabajar en la relación. Con paciencia, comprensión y la voluntad de dar espacio al otro cuando sea necesario, podéis trabajar para reparar un matrimonio roto.
Practique el perdón
El perdón es un elemento crucial en cualquier relación, especialmente en un matrimonio.
Aferrarse a rencores y resentimientos puede causar dolor emocional y dificultar el proceso de curación. Para arreglar su matrimonio roto, es esencial practicar el perdón.
Perdonar no significa olvidar o condonar los errores cometidos, sino elegir dejar ir las emociones negativas asociadas a esos errores.
Puede resultar difícil, pero es importante recordar que el perdón es una elección que puede conducir a una relación más sana y feliz.
Para practicar el perdón, empiece por reconocer sus sentimientos y el daño que ha sufrido. Habla con tu pareja sobre cómo te han afectado sus acciones y exprésale tu necesidad de sanar.
También es importante escuchar la versión de la historia de tu pareja y sus propios sentimientos sobre la situación. Esto puede ayudar a crear empatía y comprensión entre ambos.
En última instancia, el perdón es un regalo que te haces a ti mismo y a tu pareja, que os permite a ambos avanzar y crear un matrimonio más fuerte y resistente.
Encontrar la manera de volver a conectar
Cuando un matrimonio tiene dificultades, uno de los principales problemas suele ser la falta de conexión entre los cónyuges.
Para arreglar un matrimonio roto, es importante encontrar la forma de volver a conectar. Es más fácil decirlo que hacerlo, pero no es imposible. Empiece por pasar tiempo juntos, aunque sólo sean unos minutos al día.
Esfuércense por hablar, aunque sea de cosas sin importancia.
Encuentren intereses comunes y actividades que puedan disfrutar juntos, ya sea salir a pasear o ver una película.
Encontrar la forma de volver a conectar puede llevar tiempo y esfuerzo, pero merece la pena para salvar un matrimonio roto.
Recuerda ser paciente y comprensivo con el otro, y no te rindas, aunque a veces te resulte difícil.
Intimidad física
La intimidad no sólo gira en torno al sexo.
Una forma de revivir un matrimonio en crisis es centrarse en el contacto físico.
El contacto físico puede adoptar muchas formas. Estos actos de tacto y afecto pueden liberar hormonas del amor como la oxitocina en nuestro cerebro, lo que puede crear una sensación de cercanía y vinculación. El contacto físico también puede ser una forma no verbal de comunicar amor y cariño a tu pareja.
Por ejemplo, intente cogerse de la mano, acariciar a su pareja y abrazarse más a menudo.
Cuando se atraviesa una mala racha, estos pequeños gestos de afecto y ternura pueden ayudar a reforzar la conexión al provocar la liberación de hormonas del amor como la oxitocina.
Reavivar la intimidad a través del tacto puede devolver a la relación la chispa que le faltaba.
Recuerda que es importante que hables con tu pareja sobre lo que le hace sentir cómodo y feliz en lo que respecta al contacto físico y que siempre des prioridad a sus límites y necesidades.
Acudir a terapia
Cuando parezca que nada funciona y lo haya intentado todo para salvar su matrimonio, considere la posibilidad de buscar ayuda psicológica.
Un consejero puede ayudarles a identificar la raíz de sus problemas y ofrecerles formas eficaces de comunicarse y resolver los conflictos.
El espacio seguro y sin prejuicios que proporciona un terapeuta puede darles a usted y a su pareja la oportunidad de expresar sus emociones y pensamientos sin miedo a ser juzgados o criticados.
El asesoramiento también puede ayudarles a aprender mecanismos de afrontamiento sanos y proporcionarles herramientas para gestionar los problemas que puedan surgir en el futuro.
A veces, se necesita una perspectiva externa para ver las cosas con claridad y ayudaros a trabajar juntos para sanar y fortalecer vuestra relación.
En general, buscar asesoramiento no es un signo de debilidad, sino una prueba de la fuerza que se necesita para tomar medidas eficaces para mejorar su matrimonio.
Reflexiones finales…
En conclusión, reconstruir un matrimonio roto requiere esfuerzo, compromiso y voluntad de cambio.
Requiere que ambos cónyuges asuman la responsabilidad de sus actos y trabajen juntos para encontrar soluciones a los problemas que causaron la ruptura.
Las diez estupendas maneras que se describen en este artículo son sólo un punto de partida para quienes desean reparar su relación.
Ya sea practicando el perdón, encontrando formas de conectar de nuevo o buscando asesoramiento profesional, la clave es ser abiertos y honestos el uno con el otro y abordar el proceso con paciencia y comprensión.
Recuerde que sanar un matrimonio roto no es una solución rápida, sino un viaje que requiere tiempo, dedicación y mucho trabajo.
Sin embargo, con la mentalidad y las herramientas adecuadas, es posible reconstruir un matrimonio fuerte y sano que resista el paso del tiempo.